El entrenador y exrider de la selección chilena de bodyboard combina técnica, motivación y liderazgo para consolidar a Chile como una potencia mundial, preparando a nuevas generaciones que desafían olas y límites con pasión y resiliencia.
Chile ha ido ganando terreno en el circuito mundial de bodyboard, y gran parte de este ascenso se debe a la labor de Renato Arellano, entrenador de la selección nacional. “Representar a Chile es un orgullo y una gran responsabilidad. Entrenar a la selección significa devolverle al deporte todo lo que me ha entregado en mi carrera”, afirma Renato, resumiendo la pasión que lo guía cada día.
Bajo su liderazgo, la selección chilena no solo se prepara físicamente, sino que incorpora estrategias técnicas, tácticas y apoyo psicológico para enfrentar los desafíos de cada campeonato. “Organizamos concentrados en las principales olas del país, evaluaciones de rendimiento y sesiones de videoanálisis para mejorar la toma de decisiones en el agua”, explica.
El rol de Renato dentro del equipo es integral: planifica entrenamientos, motiva a los deportistas y fomenta el trabajo en equipo. Está convencido que un buen entrenador debe inspirar confianza y transmitir la pasión por lo que se hace. A él le gusta estar cerca de los deportistas, escucharlos y ayudarlos a crecer tanto en lo deportivo como en lo personal.

Con esa cercanía, sus apuntan a consolidar a Chile como potencia en el bodyboard mundial. En lo inmediato, sumar medallas en los próximos ISA World Championship y posicionar a más riders nacionales dentro del top 10 mundial.
¿Qué significa para ti representar a Chile entrenando la selección nacional?
Representar a Chile es un orgullo y una gran responsabilidad. Entrenar a la selección nacional de bodyboard significa poder devolverle al deporte todo lo que me ha entregado a lo largo de mi carrera. Es trabajar cada día para que nuestros deportistas puedan competir de igual a igual con los mejores del mundo, llevando la bandera chilena a lo más alto en cada playa donde nos presentamos.
¿Cómo se organiza y prepara actualmente la selección chilena de bodyboard?
Trabajamos bajo un plan de alto rendimiento que incluye preparación física, técnica, táctica y apoyo psicológico cuando es necesario. Organizamos concentrados en las principales olas del país, evaluaciones de rendimiento y sesiones de videoanálisis para mejorar la toma de decisiones en el agua. Además, buscamos alianzas con municipios, empresas privadas, el Comité Olímpico y el Instituto Nacional de Deportes para asegurar los recursos necesarios para viajes y competencias internacionales.
¿Qué rol cumples dentro del equipo: liderazgo, motivación, técnica?
Cumplo un rol integral: me encargo de la planificación técnica y táctica, pero también trabajo en la motivación y cohesión del equipo. Creo que un buen entrenador debe inspirar confianza y transmitir la pasión por el deporte. Me gusta estar cerca de los deportistas, escucharlos y apoyarlos a crecer tanto en lo deportivo como en lo personal.

¿Cuáles son las principales metas deportivas de la selección para los próximos campeonatos internacionales?
Nuestro objetivo es consolidar a Chile como potencia mundial de bodyboard. Buscamos sumar medallas en el próximo ISA World Championship y mejorar nuestro ranking por equipos. Además, queremos posicionar a más deportistas chilenos dentro del top 10 mundial en las distintas categorías.
¿Qué fortalezas distinguen al bodyboard chileno frente a otros países con más tradición?
Nuestra principal fortaleza es la combinación entre la calidad de nuestras olas y la resiliencia de nuestros deportistas. Chile tiene olas de nivel mundial, muchas de ellas muy desafiantes, lo que nos otorga una ventaja técnica. Además, nuestros riders son perseverantes y resilientes, con historias de vida inspiradoras, y no temen enfrentar condiciones extremas, lo que nos permite competir de igual a igual con países como Estados Unidos, Hawái, Australia, Brasil o Perú.
¿Qué playas en Chile son clave para el entrenamiento del bodyboard de alto nivel?
Arica se ha consolidado como la capital del bodyboard chileno gracias a olas como “El Flopos”, reconocida internacionalmente. Pero también son fundamentales Iquique, Antofagasta, Reñaca y algunas olas de la Región de Valparaíso, como Pichicuy. Estas locaciones ofrecen condiciones ideales para entrenar maniobras y estrategias de competencia.
¿Cuáles son los principales desafíos que enfrenta el bodyboard en Chile en términos de apoyo, infraestructura y proyección?
El financiamiento sigue siendo nuestro mayor desafío. A pesar del crecimiento del deporte, necesitamos más apoyo tanto privado como estatal para que nuestros riders puedan competir internacionalmente sin depender exclusivamente de recursos propios. También es necesario desarrollar infraestructura específica para preparación física y trabajo multidisciplinario. Aun así, cada año avanzamos más gracias al compromiso y la pasión de la comunidad del bodyboard.

¿Cómo ves el recambio generacional en el bodyboard chileno? ¿Hay nuevos talentos emergiendo?
Lo veo muy positivo. Una nueva camada de jóvenes está empujando con fuerza, demostrando gran nivel técnico y ambición competitiva. Nuestro rol como equipo técnico es guiarlos, entregarles las herramientas necesarias para que alcancen su máximo potencial y asegurar que el bodyboard chileno siga creciendo y manteniéndose entre los mejores del mundo.
¿Qué sueñas lograr en lo personal y junto a la selección nacional?
Mi sueño personal es que Chile vuelva a obtener un título mundial por equipos y que podamos contar con campeones mundiales individuales de manera constante. Además, quiero dejar un legado en la formación de nuevos entrenadores y un sistema de trabajo sólido que continúe más allá de mi gestión. En lo personal, seguir compitiendo y mostrar que se puede ser atleta y entrenador a la vez es una motivación diaria que me valida con mis deportistas.






